El Ministerio de Salud trabaja con programas preventivos dirigidos a adolescentes y a adultos para la detección oportuna de adicciones, informó hoy el psiquiatra Manuel Escalante, coordinador de la Estrategia de Salud Mental y Cultura de Paz de ese sector.
“Nosotros ofrecemos a los burgomaestres compartir nuestra experiencia, pues debemos identificar el consumo excesivo de alcohol como un problema de salud pública creciente, que debería involucrarnos a todos”, expresó.
En tal sentido, el Minsa saludó la iniciativa de los alcaldes distritales de Lima de establecer un horario para la venta de bebidas alcohólicas como parte del Plan Zanahoria, a fin de detener la delincuencia. Este plan promoverá una sociedad sin violencia, con salud física y mental.
Según el especialista, la ingesta excesiva de alcohol puede generar problemas cardiacos, úlcera gástrica, cirrosis, pancreatitis, envejecimiento prematuro; así como cáncer de estómago, garganta, laringe, esófago, e incluso hasta la muerte, producto de un coma etílico.
A esta larga lista debemos sumar las consecuencias psíquicas que pueden empezar con lagunas de memoria, depresiones, psicosis, celotipia (celos sin fundamentos), demencia por el alcohol, entre otras.
Dentro de las consecuencias sociales están el fracaso laboral, situaciones de violencia familiar, divorcios, soledad, accidentes de tránsito, explicó Escalante. Fuente: ANDINA