
Así lo dio a conocer el director de ese nosocomio, Julio Cano Cárdenas, quien sostuvo que los padres cumplen un papel fundamental en el desarrollo del bebe, además de ser un gran apoyo emocional a las gestantes, especialmente durante el parto.
Señaló que los motivos por los cuales los padres no acompañan a sus parejas a estas terapias son diversos, como por ejemplo, el deber de cumplir horas extras de trabajo, falta de interés o por tratarse de madres solteras.
Cano explicó que en los programas de estimulación prenatal los especialistas enseñan a las futuras madres a controlar sus emociones, sea de angustia y estrés, así como a manejar su respiración, para que el parto sea exitoso.
Precisó que la presencia del padre en estas terapias facilita la labor de la madre al dar a luz, puesto que ayuda a que lo aprendido se ponga en práctica.
Adicionalmente, señaló, cuando el padre tiene conocimiento del sistema motivacional enseñado a la madre gestante y a su bebé, ambos tendrían la facultad de estimular el cerebro del recién nacido, a fin que no olvide lo aprendido.
Los programas de estimulación prenatal permiten transmitir al bebé sensaciones positivas, como el afecto y la tranquilidad, así como enseñarle a reconocer sonidos e imágenes luminosas.
Cano Cárdenas sostuvo que el 60 por ciento de las gestantes que se atienden en el hospital, acude a estos programas, mientras que un significativo 40 por ciento no asiste debido a que muchas mujeres trabajan y no tienen tiempo para continuar con las terapias.
Madres adolescentes
Por su parte, la obstetra del San Bartolomé María Guadalupe Reyes informó que a diario el Servicio de Consejería a Madres Adolescentes atiende a un promedio de 20 pacientes, quienes oscilan entre 14 y 19 años de edad.
A las gestantes adolescentes se les brindan los servicios de estimulación prenatal, psicoprofilaxis, charlas nutricionales, así como información sobre métodos anticonceptivos. ANDINA