(ANDINA).- El congresista Santiago Fujimori respaldó la propuesta para establecer núcleos ejecutores para la inversión pública, pues dijo que cuando se aplicó este esquema en la década de 1990 se lograron reducir de 40 a 10 por ciento los gastos administrativos de las obras sociales.
Según explicó, la virtud de este modelo de trabajo es que la propia comunidad se encarga de elegir, ejecutar y fiscalizar la obra a realizar, dentro de los parámetros técnicos y programáticos que en ese entonces establecía el Fondo Nacional de Cooperacion para el Desarrollo (Foncodes).
Fujimori recordó que este sistema fue catalogado por el Banco Mundial (BM) y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) de modelo a seguir, pues es el pueblo mismo el que participa de su desarrollo.
Sobre los peligros de corrupción, el legislador dijo que se olvida que es la asamblea de la comunidad la que se encarga de velar por la correcta utilización de los recursos, como directa beneficiaria.
Señaló que en la década pasada, el Foncoces establecía que las obras tenían que ser necesariamente de impacto social o productivo para la comunidad, así que no había peligro de “elefantes blancos”.
En segundo lugar, habían rangos de costos para ejecución de obras; por ejemplo, para tal zona una obra tenía una cierta escala de costo y la unidad ejecutora no podía transgredir esos montos, con lo cual se impide un eventual sobrecosto.
El legislador lamentó que a partir de 2000 los sucesivos gobiernos desactivaran este modelo, según dijo, por razones políticas, porque se quería desmantelar todo lo hecho por el fujimorismo, y porque se buscaba crear más puestos en el Estado.
La puesta en marcha de los núcleos ejecutores, en el marco de la "descentralización popular" anunciada por el presidente Alan García en su mensaje de Fiestas Patrias, tiene por objetivo involucrar a la población organizada en la ejecución de pequeñas obras que no excedan los 500 mil nuevos soles de valor.