"Año de la Integración Nacional y el Reconocimiento de Nuestra Diversidad"

viernes, 18 de diciembre de 2009

Advierten que escolares desaprobados pueden deprimirse y hasta tener ideas suicidas

(ANDINA).- Ansiedad, depresión profunda e incluso ideas suicidas podrían presentarse en niños y adolescentes que están por reprobar el año o reportan un bajo rendimiento escolar, advirtió hoy el Ministerio de Salud (Minsa) a unos días de entregarse las libretas en los centros educativos.

Ruth Torres, psicóloga de la estrategia Salud Mental y Cultura de Paz del Minsa, recomendó no reprender ni castigar físicamente a los niños por el mal rendimiento escolar, ya que ello se debe en su mayoría a problemas emocionales o psicológicos como baja autoestima.

“Todo lo que se refleja en notas a fin de año ya es un proceso que ha estado viviendo el niño o el adolescente, lo cual va ser un acumulo de estados emocionales disfuncionales, como estrés y desesperanza”, explicó la especialista.

Agregó que cuando llega el fin de año y se presentan las notas al papá, los niños se desestabilizan mucho más, por lo cual podrían tener ideas de suicidarse o en todo caso caer en estados de depresión y ansiedad.

Indicó que en los hospitales e institutos especializados del Minsa se trata a niños y adolescentes que presentan ideas suicidas principalmente por la presión que sienten de los padres para que culminen el año escolar con resultados muy exitosos.

De acuerdo con la especialista, es necesario que los progenitores estén atentos a los cambios de conductas de los hijos como alteración del sueño, depresión, irritabilidad, bajo apetito y desinterés total.

Torres reiteró que el acompañamiento de los padres durante la etapa escolar tiene una incidencia fundamental en los logros académicos y emocionales, por lo que es necesario que se mantenga una comunicación permanente con los escolares.

Ante la posibilidad de que el menor tenga que repetir el año escolar es necesario que los padres detecten las verdaderas causas de la desaprobación, tanto en el niño, en el colegio como en la familia, para poder encontrar una vía de ayuda.

Se recomienda a los padres de familia, cuyos hijos han tenido un bajo rendimiento escolar, que aprovechen las vacaciones de verano para que junto con los menores asistan a los establecimientos del Minsa, en busca de ayuda especializada.

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