"Año de la Integración Nacional y el Reconocimiento de Nuestra Diversidad"

jueves, 17 de diciembre de 2009

Guibovich: Debemos estar a la altura de una sociedad que exige más transparencia

(ANDINA).- El Ejército tiene que estar a la altura de una sociedad que exige más transparencia y mejores resultados de los presupuestos militares, afirmó el comandante general de esta arma, Otto Guibovich, en la ceremonia de clausura del año académico de la Escuela Militar de Chorrillos.

"Solo así podremos posesionarnos creiblemente en una sociedad que demanda cada vez más transparencia y mejores resultados de los presupuestos que nos asignan", afirmó en su discurso.

Guibovich dijo en su discurso que el Ejército atraviesa por una etapa de repotenciación, a través de la modernización física y conceptual, pero también es un momento de "transformación de estructuras y de revisión de paradigmas que racionalmente pueden ya no ser funcionales a nuestra realidad y a nuestra misión constitucional".

En ese sentido, manifestó que las Fuerzas Armadas y sus integrantes deben mejorar su labor, actuar responsablemente, adaptarse a las nuevas exigencias, pero nunca cambiar el amor a la patria.

Destacó que esa será la misión que deberán cumplir en el puesto al que sea asignado para velar por la integridad de la patria o la de proteger a la población, que es finalmente a la que pertenece y de la cual el Ejército es una muestra representativa.

“Si nuestra misión constitucional es velar por la integridad territorial, la independencia y soberanía del Perú, en vuestras manos recae el deber de defenderla aun con la propia vida, como lo hizo el gran mariscal del Perú, Francis Bolognesi en Arica o tantos otros héroes anónimos, que ponen el pecho para salvar la democracia donde la patria lo demande”, expresó Guibovich.

Hizo un llamado a los 272 nuevos oficiales que se graduaron hoy para que con su liderazgo sepan guiar a los soldados jóvenes que estarán bajo sus comandos.

“Ello supone una enorme responsabilidad. Las vidas de jóvenes estarán en vuestras manos. Desde hoy no los evaluarán vuestros profesores o instructores. Lo harán sus comandantes. Pero los mejores evaluadores que tendrán durante toda su carrerea serán vuestros subordinados”, enfatizó Guibovich.

Los invocó primero a crecer como personas y a ser cada día mejores soldados y oficiales y que para ellos “hay que vencer las flaquezas propias de la dimensión humana”.

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