La asignación para las personas adultas mayores en extrema pobreza, anunciada por el Jefe del Estado, Alan García, en su Mensaje a la Nación, busca revalorar y dignificar la presencia de ese importante sector de la población en el núcleo familiar y en la sociedad, opinó la ministra de la Mujer, Nidia Vílchez.
Indicó que en algunos casos los adultos mayores son considerados inútiles y una carga dentro de la familia, por lo que son abandonados o entregados a casas de reposo, u otros parientes.
“También podría considerarse a los adultos mayores que han sido afectados por la violencia terrorista. La única condición es no tener beneficios previsionales ni ingresos salariales”, expresó la funcionaria.
Tras mencionar que los requisitos y las condiciones de este beneficio se evaluarán para el presupuesto de 2011, Vílchez Yucra dijo que experiencias similares ya se realizan en diversos países de América Latina como Argentina, Brasil, Chile, Costa Rica, Colombia y Uruguay.
Coincidió en que el anuncio presidencial restituye la preeminencia en la familia para los adultos mayores, y ayudaría a combatir el maltrato psicológico y físico básicamente en el entorno familiar.
En Perú existen 640,188 adultos mayores del total de la población estimada en 29 millones de habitantes.
Según datos del Ministerio de la Mujer y Desarrollo Social (Mimdes), el 72 por ciento estaría ubicado en la zona urbana y el resto en el área rural.
Asimismo, la población de pensionistas de la Oficina de Normalización Previsional (ONP) son 474,417, quienes cuentan con una pensión.
Se estima que la población que se encuentran es situación de extrema pobreza es de 75 mil habitantes.
La región con mayor población de adultos mayores es Puno, que cuenta con 13,800 adultos mayores; seguida de Cajamarca con 10,300; Cusco con 6,900; y Huánuco con 5,500. Fuente: ANDINA