Los problemas de la vida están articulados íntimamente con la índole y la vigencia de los valores. Estas no se relacionan solamente con el examen filosófico (axiológico) de la naturaleza de los valores o si los hombres “crean” o “descubren” esas instancias.
Esta temática se proyecta también en las más variadas expresiones de la vida práctica o cotidiana. Se la encuentra en las situaciones particulares y públicas de las personas, en la persistente “educación con valores”, en los escenarios políticos y económicos en donde se enfrentan abierta o encubiertamente “la fuerza de los principios” y la “ciénaga de los intereses”. Se la observa asimismo en el acierto o desacierto de una sentencia judicial. Pero también en el orbe académico, a propósito de la hermosura de un cuadro de pintura, la delicadeza de una pieza musical o el encanto de una mujer.
En términos generales, las discusiones acerca de la valoración de las cosas o la conducta o estilo de las personas traducen posturas distintas, a veces muy contradictorias.
Si se trata de personas comunes, las discusiones que no alcanzan un acuerdo suelen terminar con el antiguo adagio latino de gustibus non disputandum. En cambio, si se trata de personas que tienen una formación filosófica y pueden realizar un examen racional de la índole, alcances y rango que tienen las valoraciones en contraste, es posible encontrar un entendimiento objetivo o intersubjetivo entre dichas personas.
Es cierto que algunos grandes valores, como el bien, la justicia y la belleza inspiraron páginas profundas a filósofos como Platón, Aristóteles, los estoicos, Agustín de Hipona y Tomás de Aquino. Pero sólo en el siglo XX los distintos valores se insertan dentro de una disciplina específica llamada axiología, que integra las antiguas disciplinas de la ética, la estética, la filosofía de los valores religiosos, etcétera.
Sirva el presente escrito como introito para un breve análisis del ser de los valores y de dónde nacen y se realizan esas instancias, siempre en el contexto proteico de la vida humana. Análisis que realizaremos en próxima ocasión. Fuente: EL PERUANO